FUERZA COMPARADA DE AMBOS CONTENDIENTES (III)

Tras la votación de la Asamblea General de las Naciones Unidas  del 29 de Noviembre de 1947, en la que se decidió aceptar la Partición del Mandato de Palestina (un 20 % del primitivo Mandato de Palestina), estalló una guerra civil entre judíos y árabes palestinos, ante la mirada de los británicos, que oficialmente seguían al cargo de mantener el orden, pero que cada vez tenían menos ganas de morir en un territorio lejano que iban a abandonar en pocos meses (antes del 1 de Agosto de 1948*)
La Potencia Mandataria (el Reino Unido) anunció que abandonaría sus funciones el 15 de Mayo de 1948, con la retirada de sus últimas tropas. Por lo tanto, abandonaba a su suerte, tanto a la Comunidad Judía, o Yishuv*, como a la Comunidad Árabe Palestina que pudiera haber deseado ser independiente.
En realidad, dado que los árabes palestinos habían sufrido una purga intensiva contra cualesquiera elementos que no fueran fieles a Hadj Amin al-Husayni, Muftí de Jerusalén, y que este era un acérrimo enemigo de los británicos (hasta el punto de haber colaborado con los nazis contra el Imperio Británico y como organizador de la "Solución Final"), en la práctica la pasividad de los británicos favoreció a Abdullah de Transjordania (el favorito del Foreign Office), y a los manejos de la Liga Árabe, que había reclutado un Ejército de Liberación Árabe*(ELA) -bajo el mando de Fawzi al-Qawuqji- que se había infiltrado en el norte de Palestina, ya en fechas tan tempranas como Enero de 1948, bajo la mirada desinteresada de los británicos.
Los países árabes que integraban la Liga Árabe rechazaron absolutamente la Partición y declararon su intención de evitar la posibilidad de crear un Estado Judío por todos los medios, incluidos los violentos. Sin embargo, aparte del apoyo oficioso a la creación y mantenimiento del Ejército de Liberación Árabe, y el suministro de armas a los árabes palestinos (que no fue nunca muy abundante, puesto que las relaciones con el Muftí fueron entre malas y pésimas), su intervención oficial hubo de esperar al 15 de Mayo de 1948, al día siguiente de la Proclamación del Estado de Israel.

C) FUERZAS DE COMBATE DE LOS PAÍSES DE LA LIGA ÁRABE

En 1948, la Liga Árabe la formaban Egipto, Siria, Iraq, Arabia Saudí, Transjordania, Líbano y Yemen. Excepto Transjordania, tradicional y fiel aliado de los británicos, el resto de los países había mantenido una actitud ambigua durante la Segunda Guerra Mundial, con una opinión pública claramente  inclinada a favor de las potencias del Eje, y unos gobiernos que -entre el temor a sufrir un sangriento golpe de Estado, y al poderoso Imperio Británico- no se decantaron a favor de los aliados hasta los últimos meses de la guerra.
En la votación de la ONU seis países de la Liga Árabe (Transjordania no ingresó oficialmente como miembro hasta 1955) y otras cuatro naciones de mayoría musulmana sumaban diez votos (Egipto, Siria, Iraq, Arabia Saudí, Líbano, Yemen, Afganistán, Irán, Pakistán y Turquía); junto con la India (con una minoría musulmana muy importante), Grecia y Cuba, alcanzaron los trece votos contrarios a la partición.
Sin embargo, el 15 de Mayo de 1948 "sólo" los países de la Liga Árabe declararon la guerra al recién nacido Estado de Israel. Sus fuerzas armadas habían sido formadas y entrenadas por Francia e Inglaterra pero, excepto la Legión Árabe de Transjordania, ninguna era una fuerza combativa de primer orden. Sin embargo, una serie de razones sociales, estratégicas, y militares, hacían que la mayoría de expertos militares de EEUU -y su Departamento de Estado-, británicos, incluso del bloque del Este (pese al posterior apoyo militar checo que tanta importancia tuvo en el triunfo israelí) considerasen, en Mayo de 1948, que la causa israelí era una causa perdida debido a:

• La inmensa superioridad demográfica de los países árabes respecto al Estado de Israel. 
• El armamento de los países árabes, directamente suministrado de los almacenes del Reino Unido que, a priori, debería haber garantizado la rápida derrota del Yishuv, antes de que surgieran complicaciones internacionales.  
• La profesionalidad de los ejércitos árabes que, al menos teóricamente, habían sido formados como cuerpos militares, desarrollados y preparados por el Reino Unido. En teoría, debieran haber sido mucho más eficaces que los luchadores del Yishuv que, excepto quienes habían luchado en el Ejército Rojo y el Ejército Británico (que no compartían doctrinas militares tácticas ni estratégicas, ni siquiera idioma común) no habían sido adiestrados en otra cosa sino tácticas de guerrillas. 
• La superioridad naval y aérea de los países árabes (capaz de imponer un bloqueo sobre Israel) resultaba abrumadora cuando se produjo la Declaración de Independencia del Estado de Israel. Esta ventaja resultaría aumentada cuando la mayoría de los mandos británicos tenían simpatías pro-árabes y, excepto contadas excepciones, impidieron el desembarco de recursos destinados a los judíos todo lo que pudieron.
• La situación estratégica del bando árabe era infinitamente superior al diminuto estado judío, al que rodeaban por todos los lados; las fuerzas transjordanas e iraquíes podían cortar fácilmente la conexión entre la Galilea Judía y el resto del Estado Judío, las colonias del Negev podían ser aisladas una a una por el ejército egipcio, Jerusalén sólo podía ser socorrido por la imposible ruta del Bab-el-Wad*
• Las líneas de comunicación del recientemente proclamado Estado de Israel fueron, no sin motivo, definidas como una "pesadilla estratégica"; la decisión tomada por Ben Gurion y el Yishuv de no entregar ningún asentamiento sin combate, pese a que finalmente se reveló como una de las claves de la victoria israelí, en Mayo de 1948 parecía una decisión suicida. (1)
• El Imperio Británico se mostró, en general, favorable a los intereses árabes: en parte por la virulenta campaña de atentados del Irgún y del LEHI contra los militares británicos; también por las propias simpatías de muchos políticos y militares del Reino Unido; pero, sobre todo, por la propia conveniencia del Imperio, que veía su interés predominante crear una red de estados clientes (al estilo de Transjordania) que uniese Egipto con la India.  
• A pesar del peso del voto judío y la "simpatía" personal de Harry S. Truman hacia los judíos (nunca se sabrá cuánto había de inclinación personal del Presidente, y cuánto de cálculo electoral), el temor de EEUU a que una intervención para garantizar el cumplimiento de la resolución de la ONU facilitase una intervención de la URSS en Oriente Medio, y que Israel basculase hacia el campo socialista, tuvo como consecuencia la "neutralidad" de los EEUU en cuanto al conflicto árabe-israelí de 1948-49. (2)
• Por otro lado, el cansancio de las fuerzas judías, que llevaban seis meses combatiendo, en un nivel de movilización y exigencia muy difíciles de sostener (sus efectivos debían combatir en una guerra de guerrillas, ocasionalmente combatir en acciones de campo, y al mismo tiempo mantener la sociedad civil judía) hacía pensar que, ante el empuje de los ejércitos árabes (tropas frescas, entrenada y, dirigidas por profesionales militares) las fuerzas del Yishuv se vendrían pronto abajo.

Las fuerzas militares de los países árabes que participaron en la contienda eran las siguientes:

• Egipto: era el país más poblado de la Liga Árabe, y sus Fuerzas Armadas también eran las más numerosas. Al inicio de la Segunda Guerra Mundial contaba con unos 40000 soldados, que hacia 1948 habían aumentado hasta unos 50000 efectivos, más un número indeterminado de voluntarios (de organizaciones como los Hermanos Musulmanes, que según autores revisionistas israelíes fueron utilizados por el alto mando egipcio como "carne de cañón"), (3)  Las tropas enviadas a Palestina, bajo el mando del general Ahmed Ali al-Mwawi, consistieron en unos 10000 soldados, agrupadas en tres brigadas de infantería, una brigada de tanques (con unos 50 blindados), y tres batallones de artillería equipados con cañones, desde 57 mm hasta 152 mm de calibre. En Julio los efectivos llegaron a 20000 (la situación interna, en realidad, no podía permitir enviar más tropas), con 130 blindados y 90 piezas de artillería. Las Fuerzas Aéreas egipcias constaban de unos 250 aparatos, de los cuales sólo unos 90 eran aviones de combate en disposición de combate. Las Fuerzas Navales egipcias (por sí solas, muy superiores a las israelíes) constaban del crucero Faruq, dos destructores y otros buques menores. (4) (5)
• Iraq rivalizaba con Egipto en cuanto a tamaño de las Fuerzas Armadas (unos 50000 efectivos). Aunque su situación interna no era mucho mejor que la de los egipcios, debido a un gran esfuerzo de modernización de su ejército, estaba mejor equipado y entrenado; se organizaba en tres divisiones (dos de infantería y una de reserva), un batallón blindado (15 a 20 tanques operativos), 200 vehículos blindados y 70 a 80 piezas de artillería. Las Fuerzas aéreas consistían en unos 80 aparatos, aunque sólo unas 40 estaban operativas. El Cuerpo expedicionario iraquí a Palestina consistía en unos 5000 soldados (más adelante aumentaron hasta unos 18000), dirigidas por el general Nur al-Din Mahmud***. Estaban organizados en una brigada de infantería; un regimiento de infantería mecanizada, un batallón blindado (46 vehículos blindados medianos y ligeros) y un grupo de artillería (con 12 cañones de diferentes calibres), más diversas unidades auxiliares.
• Siria contaba con un ejército numéricamente mucho más reducido (unos 12000 soldados) que se encontraba en proceso de conversión, desde unas tropas coloniales, hacia un ejército más o menos moderno. En la guerra de 1948 intervinieron, aproximadamente, unos 8000 efectivos, distribuidos en dos brigadas de infantería, con un batallón mecanizado de tanques y una pequeña fuerza aérea de unos 20 aparatos, entre bombarderos y cazas.(4) (6) Sin embargo, el mayor aporte de Siria a la causa árabe fue la acogida a la creación del Ejército de Liberación Árabe que, aunque se suponía iba a ser reclutado, financiado y entrenado por toda la Liga Árabe, se nutrió principalmente con reclutas, armas y oficiales sirios, que además se prepararon en campos de entrenamientos sirios. Además, Siria aportó más dinero -en relación a su población o su riqueza-  que casi todos los miembros de la Liga Árabe. 
• Transjordania: el ejército nacional transjordano lo formaba la Legión Árabe, que en Febrero de 1948 estaba constituido por unos 10000 soldados; en la guerra de 1948 participaron unos 6000 hombres, divididas en dos brigadas (la primera brigada con los 1º y 3º regimientos, la segunda con los 2º y 4º regimientos); cada una contaba con sus propios escuadrones de carros de combate (unos 75 blindados en total) y de artillería (unas 45 unidades, aproximadamente) , y además entraron en combate siete compañías independientes (no encuadradas) de la Legión, y tropas de apoyo. A ellos habría que añadir voluntarios que se presentaron tras la disolución de las fuerzas de policía británicas. (7).
• Líbano: el ejército regular del Líbano era uno de los más pequeños del mundo árabe: unos 3500 efectivos (organizados en cuatro brigadas de infantería, con una compañía mecanizada y algunas unidades de artillería) (8) (9), pero su situación estratégica era ideal para asestar un golpe mortal al corazón económico del Yishuv, atacando la Galilea judía y el puerto de Haifa. Sin embargo, dada su delicada composición racial y religiosa, con cristianos, musulmanes, drusos, etc. la aportación de Líbano al esfuerzo árabe fue poco menos que testimonial 
• Los otros dos países de la Liga Árabe declararon oficialmente la guerra a Israel y participaron también -aunque modestamente- en el esfuerzo de guerra: Arabia Saudí -entre 800 y 1200 hombres, que engrosaron al ejército de Egipto- y Yemen, con unos 300 hombres. Sin embargo, por su falta de entrenamiento, y la carencia de unidades de apoyo blindadas, artillería, etc, resultaron de poca o nula utilidad práctica. 

Dada la desinformación (que podemos explicar por la minimización de las tropas en combate por los propios árabes -preocupados por no provocar a la opinión pública de EEUU, y la repercusión en la ONU, después de todo supuestamente garante de la Partición-  y la maximización de las fuerzas enemigas por parte de los judíos y sus aliados, para recabar cualquier apoyo posible) sobre las fuerzas en combate de los Ejércitos Árabes el 15 de Mayo de 1948 (cuando se produjo la invasión de Israel) resulta muy difícil establecer con exactitud las tropas de los países árabes que iniciaron la invasión cuando se proclamó el Estado de Israel.

Sin embargo, podemos calcular unos 35000 los soldados profesionales de los países árabes (entendiendo como tal los que habían sido enrolados en unidades de Ejército, entrenados para el combate, y dedicados a plena jornada a misión militar) los que, en Mayo-Junio de 1948, invadieron el territorio palestino que aún ocupaban los judíos.
En la próxima, -y última- entrada, resumiremos las posibilidades de los ejércitos en combate, para permitir que el lector comprenda qué es lo que ocurrió.  

------------------------------------------------

* Enlaces en inglés. Aunque mis preferencias serán siempre enlazar a información en español, aunque sea menos completa, en algunos casos la diferencia en la información ofrecida justifica enlazar a páginas en otros idiomas. Ruego disculpen las molestias.

**Enlaces en francés
***Enlaces en otros idiomas

------------------------------------------------

NOTAS:

1. La estrategia de "Torre y Empalizada*" (Homa u'migdal) había resultado un éxito rotundo desde su inicio, en los años veinte, y sobre todo durante la "Gran Revuelta Árabe", para contener a las Milicias del Muftí. Sin embargo, faltaba comprobar el resultado frente a la artillería y los blindados egipcios, sirios, iraquíes y, sobe todo, la Legión Árabe de Transjordania. 
2. En realidad, la posibilidad de que Israel se inclinase hacia el bloque socialista no parecía ninguna tontería en 1948. Muchos de los dirigentes judíos eran de origen ruso, y sus ideales eran (para los aliados occidentales) peligrosamente socialistas, por cuanto preconizaban la colectivización agraria, la propiedad compartida (y no privada) etc. De hecho, sólo el ideal puramente democrático del Estado de Israel pudo resistir, en medio de la agresión externa y el abandono de las potencias occidentales, la tentación de convertirse en una "democracia popular" al estilo de los satélites soviéticos.
3. Autores como Ilan Pappé* y otros revisionistas israelíes, mas muchos historiadores egipcios, tratan de minimizar la Fuerza Expedicionaria egipcia reduciéndola a unos 10000 efectivos, de los que la mitad, aproximadamente, eran -según ellos- Hermanos Musulmanes y voluntarios con escasa o nula preparación, que el gobierno -siempre según estas fuentes- envió a Palestina para que fueran masacrados por el "moderno y bien preparado" ejército de Israel. Pese a que esta tesis se ha expandido entre los medios pro-árabes, para disimular y justificar una derrota que resultó vergonzante, basta tener un mínimo sentido crítico para comprender que, dada la importancia entre la opinión pública de los Hermanos Musulmanes* en el Egipto de 1948, reclutar y enviar un importante contingente (que ni mucho menos representaba la mayoría de los Hermanos Musulmanes) a ser destrozados por los judíos, hubiera sido una acción suicida por parte del rey Faruq y el Gobierno egipcio de Mahmoud El Nokrashy Pasha* (el cual, efectivamente, fue asesinado por un miembro de los Hermanos Musulmanes; pero por la represión interna contra ellos, y no por haberlos enviado desarmados a luchar contra los judíos).
4. Karsh, Efraim (2002). "The Arab-Israeli Conflict. The Palestine War 1948". Pg 27-28. Osprey Publishing. ISBN 978-1-84176-372-9.
5. Kenneth M. Pollack (2002). "Arabs at War: Military Effectiveness, 1948-1991".  . Lincoln, Nebraska: University of Nebraska Press, ISBN 0-8032-3733-2
6. Collelo, Thomas . "Syrian, a Country Study" (1987). pg 237-238, en Chapter 5: "National Security", por Joshua Sinai. Federal Research Division. Library of Congress.
7. En Febrero de 1948 fue disuelta la Policía de Fronteras Transjordana, un cuerpo policial con reclutamiento entre árabes palestinos y transjordanos, y oficialidad británica, Su dotación era de unos 3000 efectivos. Sus miembros (la mayoría con sus armas de servicio) se enrolaron en bloque como voluntarios en la Legión Árabe, el Ejército de Liberación Árabe, o pequeñas fuerzas pro-palestinas.
8. Morris, Benny (2003): "Victimes: histoire revisitée du conflit arabo-sioniste", pg 239; Éditions complexe, 2003, ISBN 2870279388.
9. Sachar, Howard M (2007): "A History of Israel: From the Rise of Zionism to Our Time" 3ª Ed. . pg 317; Alfred A.Knopf -  New York 2007 -  ISBN 9780375711329